Jóvenes al estilo de los 5-5-5

Tres jóvenes universitarios junto a los seminaristas y el P. Manuel en el primer encuentro JVD 

Desde hace ya más de un año, varios jóvenes se han sentido interpelados por la vida y espiritualidad del Instituto, entendiendo la espiritualidad del Padre Parent, como un camino concreto hacia la santidad desde lo que cada uno constituye como joven hoy.

Para julio del año 2013, un grupo de ellos viajaba siendo parte de sus comunidades pastorales a la Jornada Mundial de la Juventud; jornada en la cual por primera vez se elevaría entre las miles de banderas de Copacabana, una con el nombre de Juventud Voluntas Dei Chile. Coincidentemente en esta misma jornada, se encontrarían con este grupo de jóvenes universitarios, otro grupo de jóvenes de similares inquietudes por la espiritualidad de nuestro Instituto.

Insertos en el ambiente de la Universidad Católica del Norte, este pequeño grupo de jóvenes que comparten casa de estudios con los seminaristas del Instituto, darían un nuevo paso en este anhelo mantenido por mucho y animado por la asistencia del Espíritu.

Luego de participar en diversas actividades pastorales, encuentros de fraternidad y por supuesto, conocer algo de la vida de Equipo, ayer por la tarde darían paso a la iniciativa de reunirse con el propósito de encentrarse y dar inicio formalmente a la Juventud Voluntas Dei en nuestro Distrito.

Luego de la eucaristía y animados por la oración frente al santísimo sacramento, iniciaron un grato momento de compartir fraterno de mucha alegría, pero también de conversación contingente sobre los desafíos de la Iglesia y la sociedad. Acompañados por el Padre Manuel Cornejo, Rector de la Casa de Formación, y a la vez Consejero General, recibieron el testimonio del fundador, y reflexionando sobre la santidad en el mundo, y la dimensión comunitaria de la misma.

Así la conversación llegó a preguntarse por el motivo que los reunía, y que significaría este encuentro. ¿Somos un deseo del Señor? ¿Respondemos al espíritu del Padre Parent? ¿Cuál es nuestra esencia dentro del Instituto?. Animados por un recorrido histórico de los miembros del Instituto desde su fundación; por el testimonio y mensaje del Padre Parent; y sobre todo por grandes preguntas sobre aquello que nos llama particularmente el Señor; reflexionaron en torno al espíritu de este nuevo proyecto que toma forma en este grupo de jóvenes.

Autodenominados como Juventud Voluntas Dei, y no precisamente como una pastoral, un movimiento, o un grupo misionero; estos jóvenes animados por estas grandes preguntas sentaron como base el ser una juventud que vive un estilo de vida particular en lo que son y hacen. No han querido enfocar su acción a una labor pastoral o social determinada, sino ver en su secularidad particular el medio en el cual Dios les llama a marcar una manera de responder distinta.

Así “Juventud Voluntas Dei” tiene que ver con jóvenes que viven lo cotidiano de su realidad desde una mirada distinta, primeramente cristiana, manifestada en actitudes particulares que reflejan la espiritualidad del Instituto. A pesar que hay muchas preguntas por trabajar bajo la asistencia del Espíritu y la oración, los jóvenes universitarios sienten cada vez más que nunca la fuerza de este llamado, de esta invitación a conformar la formalidad de esta juventud, que permita apoyar, nutrir y crecer a los jóvenes en su realidad de juventud y desarrollo personal.

Al finalizar la reunión, los jóvenes dieron gracias a Dios, y dieron gracias por este don recibido. También el encuentro fue una oportunidad para dar la bendición a un nuevo vehículo de uno de los jóvenes, lo cual justamente indica el objetivo de esta comunidad, en relación a los cotidianos y grandes momentos en la vida del joven católico y actual.

Esta iniciativa continuará desde este día histórico e importante, desde el cual se darán origen a encuentros que permitan ir definiendo y conformando la gracia esencial dentro del carisma y espiritualidad del Instituto, lo cual permitirá a los jóvenes acompañar a otros que tienen inquietudes similares en la Diócesis de Rancagua, y también, animar a otros a vivir su juventud desde un estilo de vida distinto.